lunes, 24 de enero de 2011

LA ESPAÑA DE LA POSGUERRA, 1939-1959: ASPECTOS SOCIALES, POLÍTICOS Y ECONÓMICOS

Al obtener la victoria, el bando nacional estableció una dictadura militar conservadora y en principio fascista. El régimen, que se creía provisional y debilitado por la victoria de los Aliados en la 2ª Guerra Mundial, sobrevivió y pudo participar en la Guerra Fría. La no beligerancia de España tuvo como consecuencias una devastación material y la fractura social, que fueron difíciles de superar debido a la autarquía, impuesta por Franco, y la ausencia de una posible reconciliación. A finales de los cincuenta, España entró en un período de desarrollo, gracias a las reformas económicas liberalizadoras, que rápidamente tuvo efectos modernizadores en la sociedad y, en los años setenta, en la política, cuando España, en la Transición, deje de ser una dictadura y se convierta en un Estado democrático.

1. Fundamentos y apoyos del Régimen

1.1. Instituciones, bases ideológicas y oposición.

El régimen de Franco fue una dictadura militar y fascista, esto último provocado por las nuevas influencias que se vivía en Europa, a cerca de la organización política y social, en relación con el régimen fascista. Él primer período de la dictadura se caracterizó por la importancia que se le dio al culto a la personalidad de Franco, la defensa del tradicionalismo y el rechazo al sistema político democrático parlamentario.

El Ejército, junto con la Iglesia, apoyaron el régimen de Franco. La Iglesia, a cambio, recuperó el control de la enseñanza. Sus principios morales inspiraron la legislación franquista. Por otra parte, el Ejército mostró su carácter castrense en la sociedad civil, además de ocupar cargos importantes en el gobierno y la administración.

La unificación de los grupos políticos, lograda en la Guerra Civil, (FET y de las JONS) hizo posible que Franco pudiera tener un fuerte control social. LA única oposición, tolerada por El Caudillo, era el de la monarquía. Los juanistas, defensores del regreso de la monarquía en la figura de don Juan de Borbón, no tuvieron éxito. El resto de la oposición era perseguida y sobrevivió en el exilia y, algunos como la guerrillera maquis, en el interior de forma clandestina.

1.2. Bases sociales

La dictadura de Franco se apoyó en la oligarquía agraria y los grupos financieros e industriales. Contó con el apoyo de los campesinos propietarios, sobre todo en el centro y en el norte, de las clases medias y de los funcionarios, después de la depuración que tuvo lugar en la posguerra. En general, la clase obrera se mostró esquiva frente al régimen. En general, predominó la indiferencia en el ámbito político, producida por la represión y el trauma de la revolucionaria etapa política anterior.

2. España durante la Segunda Guerra Mundial (1939-1945)

Hasta 1942, etapa de dominio del Eje, el régimen intentó crear un modelo de Estado fascista. Se proclamaron leyes para la represión de la oposición con efectos retroactivos (Ley de Responsabilidad política, Ley de represión contra la masonería y el comunismo). Por otra parte, se organizaban los sindicatos verticales y organizaciones juveniles (Frente de Juventudes, Sindicato Español Universitario,…). La represión se mantuvo: aproximadamente 40.000 ejecuciones y 600.000 exiliados. Las Cortes Españolas era la representación popular.

Al comienzo de la 2ª Guerra Mundial, España adoptó una posición neutral, pero al caer Francia España adoptó una posición de no beligerancia a favor del Eje. Franco mantuvo, ante esta situación, relaciones con Alemania para solicitar su entrada en el conflicto. Pero la participación de España en la guerra no puedo ser posible, debido a las penurias del país después de la posguerra y la falta de una oferta atractiva del Eje: entrevista con Hitler (Hendaya, octubre 1940) y con Mussolini (Bordighera en 1941). Sin embargo, España envió un cuerpo de voluntarios, la División Azul, al Eje cuando Alemania invadió la URSS. En 1943, ante la posibilidad, cada vez mayor, de que la victoria fuera del bando de los Aliados, España volvió a adoptar una posición neutral.

3. España condenada internacionalmente. La Guerra Fría

El cambio a la neutralidad, adoptado por Franco antes de finalizar la guerra, no fue aceptado por los Aliados. Como consecuencia de sus actos en la 2ª Guerra Mundial, España fue vetada en el ingreso de la ONU y en la Conferencia de Potsdam, y además fue condenado el régimen franquista en la Asamblea General de la ONU. En el año 1946 se Francia cerró la frontera que la unía con España y se retiraron todos los embajadores autorizados que estaban en Madrid. Posteriormente, Franco abandonó la referencia fascista en su gobierno, al mismo tiempo que resaltaba los aspectos más tolerables de su régimen en Occidente: catolicismo, anticomunismo,… También inició una aproximación al mundo árabe y a algunos países hispanoamericanos, especialmente a Argentina.

LA condena que la ONU la había hecho a España fue retirada por su posición en la Guerra de Corea. La posición estratégica que tenía España, fue motivo para que EE.UU firmara un acuerdo de ayuda económica y cooperación militar en 1953. El mismo año la Santa Sede firmó el Concordato. Finalmente España es admitida en la ONU(1955) y otras organizaciones internacionales, y el recibimiento que Franco dio a Eisenhower.

4. Del fascismo al nacionalcatolicismo y la tecnocracia

LA construcción legal del régimen de Franco dio un cambio debido a la derrota del bando fascista en la 2ª Guerra Mundial. El fuero de los Españoles, que se presentó como una carta otorgada, otorgaba algunos derechos a los españoles, pero con restricciones y sin garantías.

Después, Franco se apoyó más en los ministros procedentes de organizaciones católicas (Asociación Nacional de Propagandistas). Por otro lado, los monárquicos reclaman su lugar en la monarquía, pero Franco se niega. Cuando se aprobó la Ley de Sucesión, que define a España como Reino, Franco tan sólo acogió en España a Juan Carlos, hijo de don Juan de Borbón, siendo éste quién ocuparía el trono.

En los años cincuenta, se observa cómo Franco va depositando, cada vez en mayor medida, una confianza en Carrero Blanco, tradicional católico, y el peso de la organización sindical al régimen: nacionalsindicalismo. En 1956 se produjeron las primeras muestras de oposición al régimen en la calle: huelgas universitarias, huelgas industriales en Cataluña, Asturias y el País Vasco. El malestar, económico y político, se recupera con la integración, en el Gobierno y la Administración, de los tecnócratas, la mayoría miembros del Opus Dei. La construcción institucional del régimen llega a su fin con la aprobación de la Ley de Principios del Movimiento (1958), que separa al régimen franquista del fascismo, al igual que de la democracia. El Estado es una monarquía, tradicional y católica.

5. La economía

La tendencia proteccionista de la economía española llegó al límite en los primeros años de la dictadura, con la autarquía. Se junta la ambición de la autosuficiencia productiva con el fuerte control que tenía el Estado en la economía. La política del régimen, inspirada en el fascismo, dificultó la recuperación económica del país después de la posguerra.

La utilización de las cartillas de racionamiento finalizó en los años cincuenta y la planificación industrial, liderada por el INI (1941), fue ineficaz. En el ámbito agrario, se compensó la devolución de tierras a los terratenientes con un plan de extensión del regadío, y así consiguió evitar el malestar entre los jornaleros. La condena que sufrió España, tras finalizar la 2º Guerra Mundial, por la ONU provocó que la autarquía fuera la única política posible. Gracias al suministro de trigo, que nos aportaba Argentina, se evitó hambrunas a finales de los cuarenta.

En los años cincuenta, los mediocres resultados de la autarquía eran notables y, entre el 56 y el 58, el malestar social cada vez era mayor. LA llegada de ministros tecnócratas, a finales de los cincuenta, abrió una etapa de apertura económica e inmediato despegue económico.

Los antiguos sindicatos se sustituyeron por los sindicatos verticales, en los que se agrupaban trabajadores y empresarios por sectores productivos. Se prohibió la huelga. La legislación laboral del franquismo fue proteccionista de los trabajadores gracias a la influencia de los falangistas, principalmente en materia de despido. En general, los trabajadores no apoyaron el franquismo y su encuadramiento en el sindicato vertical respondía a una obligación formal.

6. La sociedad y la cultura

La guerra finalizó con la victoria de los conservadores. Los derrotados fueron perseguidos: depuración en la Administración, exilio, campos de concentración, ejecuciones… En España se impuso un modelo social tradicional de influjo religioso. La mujer fue desterrada al ámbito doméstico y la familia se convirtió en el seno de la organización social básica. El adoctrinamiento político se realizó mediante las organizaciones del Movimiento Nacional y fue importante en el ámbito de la enseñanza.

La mayoría de los intelectuales se exiliaron. El franquismo favoreció un regreso a la tradición cultural: exaltación del nacionalismo y de las virtudes militares, y la historia imperial. La censura fue fuerte. El cine se basaba en los valores que proclamaba el régimen del país. El ocio de los españoles estaba concentrado en el fútbol y los toros. El régimen contó con un sector de la intelectualidad española y, más adelante, toleró obras sutilmente críticas.

1 comentario:

  1. Hola a todos!
    Dejo un video de un hombre con recuerdos sobre el posguerra, el Franquismo hasta la democracia!
    Espero sea interesante para el blog!

    El gran cambio de España

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